La salud es un derecho
humano reconocido por la Organización de Naciones Unidas.(1) La Constitución
Española reconoce el derecho a la protección de la salud, siendo una
competencia de los poderes públicos organizar y tutelar la salud pública a
través de medidas preventivas y de las prestaciones y servicios necesarios, así
como fomentar la educación sanitaria, la educación física y el deporte.(2)
El objetivo de los
recortes sanitarios y de la privatización de sus estructuras que están llevando
a cabo tanto el Gobierno central como las comunidades autónomas, no es aumentar
la eficiencia del sistema y el ahorro sino la obtención de beneficios
económicos, lo que deriva en una peor calidad asistencial, un aumento de la
desigualdad y, finalmente, un sistema más injusto e insolidario.(5)
Hace ya unos años, la
ciudadanía burgalesa reclamó y consiguió la construcción de un nuevo hospital
de carácter público, pero la Junta de Castilla y León optó por una formula de
concesión cuyas consecuencias sobre el funcionamiento de la sanidad burgalesa y
castellano leonesa estamos empezando a padecer: el sobrecoste del Hospital
Universitario de Burgos (HUBU) es prácticamente el doble del importe de la
concesión inicial y el canon anual a pagar es actualmente de más de 71 millones
de euros, lo que está hipotecando la sanidad no sólo de Burgos sino de toda la
comunidad autónoma. La Administración se ha mostrado excepcionalmente opaca a
la hora de comunicar a los ciudadanos los costes reales de este modelo.(6)
La gestión del HUBU se ha
mostrado cada vez más ineficiente. No hay un marco establecido para saber qué
cuestiones son competencia de la dirección de SACYL y cuáles de la empresa
concesionaria. El Hospital de Burgos es el que más demora asistencial acumula,
con miles de pacientes en lista de espera para intervenciones quirúrgicas,(7)
pero también para pruebas diagnósticas y primeras consultas.(8)
La circulación en el
hospital, a donde se acercan fundamentalmente personas con algún grado de discapacidad,
es absolutamente disparatada y hay grandes distancias que recorrer con circuitos
asistenciales mal establecidos y peor
señalizados.(9) Acceder al hospital supone tener obligatoriamente que usar los
servicios de parking que son extremadamente caros.
El sistema de
informatización de las historias clínicas de los pacientes no ha completado su
implantación y supone una pérdida de información clínica muy relevante, además
de no garantizar la confidencialidad.
La dirección del Hospital
ha iniciado una política de nombramientos a dedo, basados en la afinidad
política y ha usado el cese para establecer un control absoluto de los mandos
intermedios hospitalarios.(10,11)
Los recursos económicos
siempre serán finitos y lo que se malgasta en un apartado no puede usarse para
lo necesario. El agujero que produce el
HUBU está dificultando la financiación suficiente de la Atención Primaria no solo
en Burgos, sino en toda la comunidad autónoma.
En los últimos años se ha
retrocedido incluso en la accesibilidad a pruebas diagnósticas, lo que ha
agudizado la indefensión de los pacientes sometidos a enormes y crecientes
listas de espera. Las listas de espera y la falta de medios están obligando al
médico de Atención Primaria a asumir la responsabilidad única de la atención de
pacientes complicados y situaciones difíciles en tanto son atendidos en el
hospital.
La situación se ha hecho
critica a propósito de la actual crisis económica que está sirviendo de
cobertura para recortes draconianos en la financiación de la Atención Primaria,
lo que ha llevado a suprimir servicios básicos como centros de guardia en el
medio rural,(12) o la disminución de más de un 80% de las sustituciones del
personal por vacaciones,(13) además de no sustituirse las bajas por enfermedad
y las jubilaciones con el consiguiente gravísimo deterioro en la asistencia a los
usuarios, que incluso pierden la referencia de su médico de cabecera durante
periodos que pueden resultar muy largos.
Los servicios sanitarios
son complejos y requieren de una adecuada gestión que permita superar sus
deficiencias y adaptarse a las necesidades cambiantes de la población. Una
gestión deficiente no puede ser un pretexto para la privatización de los
servicios sanitarios. La adecuada gestión de un Sistema Nacional de Salud
requiere de la participación de todos los implicados, ciudadanos, profesionales
y gestores, para buscar las mejores soluciones en cada momento, sin olvidar que
la salud es un derecho y su organización y tutela, una competencia de los
poderes públicos y no una “oportunidad de negocio”.
Dentro de una sociedad
democrática, la defensa de los derechos ciudadanos corresponde a los propios
ciudadanos, para que nuestros representantes los defiendan fielmente sin ceder
ante intereses particulares que buscan el beneficio privado por encima de los
derechos humanos.
¡DEFENDAMOS LO PÚBLICO. DEFENDAMOS LO NUESTRO. SANIDAD PÚBLICA SÍ!
(1) Artículo 25 de la Declaración Universal de Derechos Humanos.
(2) Artículo 43 de la
Constitución Española.
(3) Elola,
J.: Health Care Reforms in Westerm European Countries: The relevance of
Health Care Organización. IJ health
services 1996.
(5)
Benach J, Muntaner C, Tarafa G, Valverde C. La sanidad está en venta.
Barcelona: Icaria; 2012. 112 p.
(6)
El norte de Castilla. No habrá comisión de investigación en las Cortes sobre el
Hospital de Burgos. 20/02/2013.
(7)
Diario de Burgos. La lista de espera para operarse se multiplica por tres en un
año. 9/08/2012.
(8)
Diario de Burgos. La lista de espera de consultas crece un 21% tras los
recortes y el traslado. 1/03/2013.
(9)
Diario de Burgos. La concesionaria del HUBU ejecutará la parada de bus junto al
ascensor. 21/01/2013.
(10)
Diario de Burgos. Sería frustrante que el hospital quiera intimidar a los
profesionales. 8/11/2012.
(11)
Diario de Burgos. Dimite el “líder” de Medicina Interna tras 6 meses en el
cargo. 4/05/2013.
(12)
Diario de Burgos. Oña y Pradoluengo recurren ante el TSJ el cierre de las
guardias médicas. 12/3/13
(13)
Gerencia Atención Primaria, Sacyl . Pacto de Objetivos para 2013.