A medida que va apareciendo información sobre el sistema utilizado
por la Junta de Castilla y León para la construcción y explotación de
nuevo hospital de Burgos, van afirmándose las sospechas que teníamos
sobre lo mal que queda el interés público.
En el Contrato de Adjudicación, aparecen detalles que confirman las
ventajosísimas condiciones para los inversores.
Un ejemplo es la Electricidad. La concesionaria FACTURA el consumo del hospital al Sacyl a razón de 0,20 € /Kw consumido. Eso es mucho más de los aproximadamente 0,13 € que los ciudadanos pagamos en nuestros domicilios pero el precio al que lo compra el Sacyl directamente a la eléctrica como gran consumidor es muy, muy, inferior.
Un ejemplo es la Electricidad. La concesionaria FACTURA el consumo del hospital al Sacyl a razón de 0,20 € /Kw consumido. Eso es mucho más de los aproximadamente 0,13 € que los ciudadanos pagamos en nuestros domicilios pero el precio al que lo compra el Sacyl directamente a la eléctrica como gran consumidor es muy, muy, inferior.
Ahora hagan una sencilla cuenta.
Simplemente por actuar de intermediario, la concesionaria GANA una enorme cantidad de dinero. A mayor consumo, mayor beneficio.
“El HUBU consume tanta energía como 20.000 habitantes”
“Nada menos que 25 millones y medio de
kilovatios hora (kWh).”